Buscando nuevas obras para enseñar a mis alumnos encontré algo que vengo viendo hace un tiempo pero que consideraba rarezas... Una excelente guitarrista rusa llamada Irina Kulikova estaba tocando una obra llamada "En tus manos" del compositor mexicano Eduardo Díaz a quien no conocía hasta ese momento.

La obra es realmente muy bonita y simple en el mejor de los sentidos, no hace firuletes extraños en busca de impresionar al vecino ni pone notas que en lugar de enriquecer la armonía confunden a cualquiera. Es el tipo de obra que, cuando comencé a conocer el mundo de la guitarra clásica y a formarme como alumno me hubieran dicho que era para "simplistas" y que ningún guitarrista serio tocaría eso pudiendo interpretar a Joaquín Rodrigo o cualquier otro compositor del repertorio segoviano.

Es muy interesante (para los raros que nos interesa esta disciplina) la aparición de compositores que están mostrando su obra sin ningún tapujo y sobre todo es algo nuevo que guitarristas de excelente nivel como Irina Kulikova nos muestren todo lo bien que puede sonar esa música.

Quizá sea que las redes audiovisuales han hecho que muchos y muchas tomen conciencia de que por más que en su camino hayan tocado obras complicadísimas y poco interesantes para la mayoría de las personas no tienen por qué limitarse a quedar dentro del dogma académico. Quizá sea que hayan notado que por más que toquen las cuatro suites de Bach una detras de la otra van a obtener mucho más feedback sorprendiendo con algo sencillo que hasta dan ganas de aprender a tocarlo. O quizá no sea ninguna de esas cosas... Eso es motivo de pensamiento para otro posteo.

Aquí dejo la excelente interpretación de esta gran guitarrista (y lo digo con admiración por su sonido y no por su gimnasia de dedos) que es Irina Kulikova:

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